En las últimas semanas, el litoral salvadoreño ha sido escenario de un inusual y persistente fenómeno de fuerte oleaje que ha provocado severos daños materiales, así como lesiones a decenas de personas. Las playas del departamento de La Libertad, especialmente El Majahual, se han visto particularmente afectadas por las intensas mareas que han sorprendido tanto a comerciantes como a turistas.

De acuerdo con el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), el origen de estos oleajes se encuentra en tormentas extratropicales formadas frente a la Antártida. Estas condiciones, conocidas como “mareas vivas”, han generado olas de hasta 1.9 metros de altura, con especial intensidad durante las madrugadas y tardes.
El pasado domingo 25 de mayo, los cuerpos de socorro reportaron más de 50 personas lesionadas, incluyendo menores de edad. En algunos casos, las olas arrastraron mesas, sillas, utensilios de cocina y estructuras metálicas de los comercios ubicados a orillas del mar. La Cruz Verde Salvadoreña, junto con elementos de la Policía Nacional Civil, desplegó equipos de atención inmediata para socorrer a los afectados.
Las playas de El Obispo, Conchalío, Bahía de Jiquilisco y zonas del Golfo de Fonseca también han registrado penetraciones del mar que afectaron viviendas temporales, restaurantes y caminos costeros.
Las autoridades de Protección Civil han emitido una serie de recomendaciones a la población, entre ellas evitar ingresar al mar durante las horas de marea alta, seguir las instrucciones de los cuerpos de emergencia y mantenerse atentos a los boletines oficiales. Además, han reforzado la vigilancia y asistencia en zonas de mayor afluencia turística.
El fenómeno ha puesto en evidencia la vulnerabilidad de las infraestructuras costeras y la necesidad de implementar planes de mitigación ante eventos climáticos extremos, que podrían intensificarse debido al cambio climático.
Mientras tanto, comerciantes afectados exigen apoyo gubernamental para recuperar sus medios de vida, justo en el inicio de la temporada alta del turismo nacional.