Santa Ana, El Salvador – Un video difundido en redes sociales ha generado una fuerte controversia tras revelar que la Residencial Ecoterra, ubicada en Santa Ana, prohíbe a sus residentes emprender negocios desde sus hogares, incluso de manera virtual, bajo amenaza de multas que alcanzan los $10,000 dólares.
En la grabación, una mujer explica que, pese a ser propietaria de una vivienda en el complejo habitacional, no puede ofrecer productos o servicios en plataformas digitales como WhatsApp, Facebook, Instagram, X (antes Twitter) o Telegram, debido a restricciones impuestas por la administración de la residencial.
Según su testimonio, cualquier actividad económica desde casa, ya sea física o virtual, está penalizada con una multa sin precedentes en el país. La medida ha provocado reacciones divididas en redes sociales: algunos exigen a la directiva que reconsidere la sanción, mientras otros cuestionan el nivel de control ejercido sobre los residentes.
“Uno paga su casa, pero parece que nunca es dueño de verdad”, expresó un usuario indignado en Facebook.
Hasta el momento, la administración de Residencial Ecoterra no ha emitido ningún pronunciamiento oficial sobre el tema, pese al creciente interés público y a la presión mediática.
